Yesica Madelen Alvarez
El emprendimiento comenzó en 2020, cuando quedé embarazada. Como era un embarazo de riesgo, tuve que dejar de trabajar, pero quería seguir generando ingresos y, al mismo tiempo, poder estar presente para la beba que venía en camino.
A medida que iba a los controles, aprovechaba para comprar, de a poco, artículos de librería e ir armando un pequeño stock. Una vez que logré reunir lo necesario, compré una impresora, que se fue pagando sola con el trabajo que iba haciendo. Así pude ir avanzando paso a paso con el proyecto.
Con el tiempo, sumé una segunda impresora, una guillotina, perforadora y anilladora. Incluso llegué a alquilar un local por dos meses, aunque no tuvo mucho movimiento, por lo que decidí continuar desde casa, donde seguí apostando al crecimiento.
Mirando videos, aprendiendo cosas nuevas, modificando diseños y creando, fui ampliando lo que ofrezco. Ya pasaron cinco años, y gracias a cada uno de nuestros clientes, hoy seguimos creciendo un poco más cada día.