Julieta Aldana Raspa

Desde que decidí emprender este viaje mi misión ha sido crear algo más que solo productos de pastelería: busco transmitir la calidez, el cariño y los recuerdos que se encierran en cada bocado, haciendo que cada cliente se sienta como en casa. Este emprendimiento nació en un momento de desafío, cuando mi pareja y yo, tras el cierre de la panadería donde trabajaba debido a la pandemia. Comenzamos ofreciendo nuestros productos a nuestros amigos y vecinos a través de WhatsApp. Con el tiempo, nos animamos a salir a las plazas a ofrecer todo lo que se pueda.

Cada uno de nuestros productos es 100% artesanal, elaborado a mano con materia prima de primera calidad.
Hoy, gracias al apoyo del Consejo de Economía Popular y Social y las capacitaciones que nos brindaron, estamos creciendo y logrando nuevas metas. Las ferias organizadas por el municipio nos han permitido llegar a más personas y compartir nuestro esfuerzo y pasión por la pastelería artesanal. Sin duda, este apoyo ha sido fundamental para seguir creciendo, tanto profesional como personalmente.